Pipa aquí 👋. Sí, la del pelo frito. Hoy vengo a hablar de ese enemigo invisible que casi todas las melenas han sufrido: el formol en los alisados brasileños.
Aunque suene a película de terror químico, esto es real. Hace unos meses, retiraron del mercado dos kits de alisado capilar de Kativa, una marca muy popular, por contener niveles peligrosos de formol. Y sí, es el mismo producto que me dejó el cabello como si hubiera pasado por una tostadora.
¿Qué pasó con Kativa?
Según comunicó la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), los kits de alisado brasileño Kativa y Kativa Xpress fueron retirados del mercado por presentar riesgo para la salud: contenían formol (formaldehído), una sustancia prohibida en cosmética capilar por sus efectos tóxicos.
El formol se usaba antes para alisar el pelo porque “sella” la fibra capilar y deja ese efecto liso de peluquería, pero a cambio puede causar quemaduras en el cuero cabelludo, irritaciones respiratorias y, con exposición prolongada, se considera cancerígeno.
Lo peor es que muchos productos aseguran ser “libres de formol”… y luego lo generan al calentarse con la plancha. 😬
El brillo engañoso: cuando la suavidad tiene truco
En su momento, el alisado brasileño se vendió como la salvación para las melenas rebeldes. Lo que no te contaban es que ese brillo espejo venía de una reacción química agresiva.
Yo misma caí. La primera semana, el pelo parecía de anuncio. La segunda, empezó a romperse. La tercera, lloré frente al espejo.
Por eso, antes de hacerte cualquier tratamiento alisador, pregunta qué lleva. Si el profesional no sabe explicarlo o si el olor te hace lagrimear, corre.
Hoy existen alternativas más seguras, como los tratamientos con aminoácidos, keratina vegetal o ácido glioxílico, pero ninguno debería oler a químico fuerte ni requerir ventilación tipo laboratorio.
Lo que aprendí (y lo que te quiero ahorrar)
Después del desastre, aprendí tres cosas:
- No todo lo que huele a salón de belleza es bueno.
- Los ingredientes importan más que las promesas.
Así que, si estás pensando en hacerte un alisado, infórmate antes. Busca opiniones reales, consulta la web de la AEMPS (actualiza los productos retirados) y desconfía de los tratamientos “milagro”.
Prometemos seguir contándote todo lo que las etiquetas no dicen. Porque sí, la belleza es poder, pero el conocimiento lo es aún más. 💇♀️
